Era verano y venía un fin de semana largo. No sabíamos muy bien que hacer pero algo siempre surge. Ángela nos ofreció su casita y allí nos fuimos, casi todos! comimos una paella buenisima! Jugamos en Barra como niños bajo las nubes de una tormenta y no dormimos por los preciosos ronquidos de algunos caballeros... aaaahh que maravilloso recuerdo me llevo.
2 comentarios:
que concentrados, si señor...
...estais pensasando en?
bicos
ton
EN dónde pensabamos continuar nuestra ruta parisina...
jajaja él se bebió un xocolat y yo una coca cola!
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